Por un “Mercado” Iberoamericano

El segundo debate televisivo entre los candidatos a la Presidencia de la República Mexicana se acerca, y será claramente más interesante que el anterior.
Principalmente porque, al parecer, en esta ocasión sí participará Andrés Manuel López Obrador, quien sigue al pie de la letra su estrategia electoral y también observó el gran revés que le causó en las encuestas el no haber participado en el primer encuentro.

Sin embargo, otra de las prioridades para este debate será estar atentos a las propuestas, más allá de las descalificaciones que se avecinan, para convencernos realmente de quién es quién. Y no intento en este blog tomar como estandarte el miedo de la población, como los blanquiazules lo han hecho, pero sí dejar en claro que la bandera que ha tomado el candidato del PRD, la de los pobres, no coincide con el personaje, ni con su partido, aunque en principio así lo hubieran deseado.

Será importante que en este debate pongamos atención en la posición que tome el partido del sol azteca respecto a la mayoría de los temas, que tanto nos incumbe a los mexicanos; como lo son la pobreza efectivamente y su modelo económico, la educación y la seguridad principalmente, para ver si realmente enarbola la ideología de la izquierda, como tanto ha querido hacer referencia junto a nuestro ex Presidente, Benito Juárez, pero sobre todo, que no titubee a la hora de dejar en claro alguna postura.

Yo, al igual que muchos otros mexicanos, estoy convencido de que la opción para este país es una corriente de izquierda, como suena mucho en los medios de comunicación, pero una izquierda auténtica y actualizada, que tenga las decisiones firmes ante las problemáticas sociales, que no se pueden solucionar de otra forma mas que por medio del diálogo, y no por medio de las doctrinas ni los radicalismos, como actualmente los de derecha han querido hacer en nuestro país, y se ven cerca de seguir intentándolo.

Es cierto que en los casos de Brasil, Venezuela, Bolivia y recientemente Chile, el trato de la ciudadanía y los mismos medios de comunicación hacia los representantes de la ideología de la izquierda, no han sido el todo satisfactorios, pero el ejemplo de España es más que claro y ejemplar para nosotros en este lado del charco, cuando por medio del diálogo, las negociaciones y sobre todo, un proyecto de gobierno bien definido, por lo menos sirve para dar pequeños pasos hacia delante.

Es por ello la importancia que tiene el descubrir la verdadera autenticidad detrás de los discursos de los candidatos presidenciales.

Está bien, seamos realistas, Patricia Mercado no ganará las elecciones de este 2 de julio próximo, incluso dudo que se acerque un poquitito al candidato del tricolor, pero una cosa es cierta, la democracia en este país, que para muchos es conformistamente incipiente, NO EXISTE, y depende sólo de nosotros contribuir, pero de forma activa, a establecer paso a paso esa democracia que tanto nos venden, ya que no sólo el acto de ir a votar nos libra de toda culpa.

Pero si le damos la oportunidad al partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina, de intentar establecerse en el Congreso de la Unión, aunque sea para contrarrestar la balanza ante el bloque neoliberalista conformado por el PRI-PAN, abriremos el camino para que nuestros hijos y nuestros nietos, logren disminuir las eternas distancias entre las clases sociales en este país.